La caución es una operación financiera que permite colocar fondos en un instrumento garantizado por el mercado (la contraparte deposita títulos que quedaran inmovilizados hasta su cancelación), a plazos sumamente cortos (de 1 a 180 días) y a tasas competitivas, fijadas desde el inicio de la operación, obteniendo un rendimiento conocido sobre dicha inversión.